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Entrevista con Ruben Matu, delegado de la Comisión interna de Lear, donde los trabajadores denuncian nuevos despidos. “El Smata debería ponerse al frente de la lucha, porque hay 200 familias en la calle”.
APU: ¿Cuál es la situación en Lear?
Ruben Matu: Hace más de un mes que venimos con suspensiones ilegales, en un principio con un 75% del sueldo. Son ilegales porque la empresa no se atiene a los procedimientos, no demuestra que esté en crisis, ni abre los balances de los últimos tres años y demostrar que tiene perdidas. En junio suspende a 17 compañeros sin goce de sueldo, el Ministerio de Trabajo sacó un dictamen donde nos dio la razón a los trabajadores, pero no intimaba a la empresa a retrotraer las medidas que tomo porque no contamos con personería gremial. El sindicato, Smata, hasta el día do hoy no tenemos novedades, ya pasó más de un mes en que la empresa está en la absoluta ilegalidad, y los directivos del sindicato no han dado ninguna respuesta. Necesitamos que el sindicato se presente ante el Ministerio de Trabajo y ratifique el dictamen del ministerio para que todo se retrotraiga al día anterior a las suspensiones.
El viernes pasado la empresa decidió despedir a más de 100 compañeros, todavía no sabemos el número real, creemos que pueden ser mucho más. Los suspenden con causas, con la excusa de bajo rendimiento, cuando hay compañeros que tienen 27 años de antigüedad, con legajos intachables, lastimados por los altos ritmos de producción, compañeras embarazadas, con hijos discapacitados. De diferentes ideologías políticas, Lear no discriminó para despedir de forma ilegal.
Vemos que después de los planes e incentivos otorgados por el gobierno, con ProCreAuto y demás, que son para cuidar las fuentes de trabajo, hay despidos masivos. Lear es un monopolio norteamericano que en el 2013 facturó 15000 millones de dólares, y las 200 familias que deja en la calle significa un 0,00125% de eso.
Ahora estamos con medidas dentro de la planta, que se encuentra parada. Hay compañeros acampando frente a la fábrica. Reclamamos los puestos de trabajo, que por algo el gobierno lanza tantos incentivos para cuidarlos. Esperamos la intervención del Ministerio, del Gobierno Nacional y del sindicato. El Smata debería ponerse al frente de la lucha, porque hay 200 familias en la calle. La planta ahora está militarizada, está Infantería dentro de la fábrica, creemos que s injusto lo que nos toca pasar, pero vamos a seguir luchando.
APU: ¿Cuál es la situación en la producción de la empresa?
RM: Nosotros sabemos que Lear viene produciendo desde principios de año hasta el 27 de mayo 470 unidades, cuando en Ford vendían 530. Estábamos 60 unidades por debajo. A partir del 27 de mayo, al suspender a la mitad del personal, esto se profundiza, y hoy Lear no llega a abastecer a Ford normalmente. No llega a sacar 200 unidades por día, cuando Ford está en 530. Queremos exigir que se cierre la importación de autos que hace Ford, que le compra a otros países o a otras filiales de Lear en el mundo. El año pasado el Gobierno Nacional firmó acuerdos millonarios con las terminales, a través del Ministerio de Industria para la sustitución de importaciones, y la empresa no cumple. Así recibe beneficios de parte del Estado y nos saca laburo a nosotros.
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